Las luces de esta habitación me llevan a momentos que ya se han ido,
hoy empiezo seguramente otro final de lo vivido.
Las manos que abrazan estas palabras quieren hacerlo entre tu pelo,
entre el ascenso a un nuevo lugar y lo prohibido.
Las luces de esta habitación gritan que ya se huele el mar,
es otra escena de calma en este invierno que busco la paz y el resurgir de sentimientos perdidos.
Las canciones que envuelven este nuevo oleaje tienen un color distinto.
Siempre me han gustado los amores imposibles.
Los amores difíciles de encontrar,
los amores difíciles de abrazar.
Siempre me han gustado los finales para volver a comenzar en un nuevo vacío que tenga que inundar.
De mí,
de ti,
de tu calor o tu frío.
David Galán – Redry
De mi próximo libro «Todos los vuelos que perdí por ti».