Tu espalda
Ojalá tener a alguien a quien escribirle,
de madrugada,
al amanecer,
después de cada café.
Ojalá tener a alguien para poder escribirle que le quiero con la yema de los dedos sobre su espalda.
Ojalá tu espalda,
ojalá.

David Galán – Redry

De mi libro «Todos los vuelos que perdí por ti».