Otoño

Es un final y es un comienzo, es un giro más en el ciclo vital de nuestras emociones, como desenvolver un caramelo de miel para la tos. Te vas como el verano y llegas bajo la lluvia, de salpicar en la piscina a escurrir el paraguas antes de entrar en casa. Es el asesinato del calor, el bienestar y el nacimiento en la sombra del frío emergente.

Otoño son veinte poemas desesperados de Neruda y una despedida, son pantalones largos y una chaqueta que se abrocha con el paso de los días cada vez un poco más arriba.

Otoño son manos perdidas en las mangas del jersey, viento en la cara y el roce frio de la nariz al besarte. Otoño es gris, marrón y amarillo.

Otoño sabe a media tarde y a café con pastas, a otros pies fríos debajo de la manta, a lo que tú quieras que sea comenzando algo nuevo. Una colección, un curso, una serie, una sorprendente oportunidad.

Otoño es quien te roba el calor y la pasión del verano, es quien te roba el amor y las vacaciones. Otoño es un ladrón que se llevó las llaves del romanticismo para no devolverlas hasta la primavera.

Otoño es jugártela al cruzar un semáforo en rojo y no atreverte a decir “te quiero” mirando a los ojos.

@Redry13