Parecía imposible
Parecía imposible volver a sentir de nuevo, y estoy
volviendo a casa helado por el invierno y caliente
por el último abrazo que me acabas de dar.
Parecía imposible, éramos el némesis de una casualidad
que hacía todo lo posible porque nos diésemos
la mano, o la sensación de congelación al pasar tus
dedos por mi espalda. Parecía imposible un beso de
reencuentro y otro interminable de despedida, madrugar
con ganas o las esperas a volver a la realidad.
Parecía imposible ser un todo, acabar con ese miedo
que te impedía acercarte un poco más a mí aunque
estuvieses a muchos kilómetros de distancia.
Parecía imposible tener solución a lo de no saber a
quién escribir mensajes de madrugada, a quien llevar
de la mano aunque no hubiese ningún rumbo fijo, a
soñar despierto con ilusiones ya olvidadas por el
tiempo. Parecía imposible volver a sentir lo que hace
años tenía olvidado, todo aquello que parecía extinto,
todo aquello que tienes miedo de no volver a sentir
nunca más.

Porque contigo quiero ser adicto de todo lo que me
hace sentir bien.

Redry – David Galán

De mi libro «Abrázame los monstruos».

Foto @camillegphoto