Eras mi monstruo favorito, el que sabía arañar mi corazón sin hacer heridas, eras quien cosía los días a la noche con tan solo rugir de alegría. Eras mi monstruo favorito, de pelo rojo, de garras de colores y una increíble capacidad para hacerte invisible cuando yo aparecía. Eras mi sueño durante el día, mi pesadilla cada madrugada, un mensaje que nunca me atrevía. Eres mi monstruo favorito, el que me hacía temblar escondido en el armario o se acercaba para darme los buenos días. Eras mi monstruo favorito, el que me quitaba el miedo cuando los demás eran mentira,

Me pasas a diario, en verso, en gris azulado y a kilómetros de lo que puede ser la alegría. Me pasas en invierno y por encima, eres notas discordantes en una canción que te recuerda, pero no siente melancolía. Me pasas porque te veo perder el control, y no me importan las vueltas de campana ni gritar en túneles sin salida. Me pasas de hoja en hoja, de página en página y de poesía en poesía, me pasas de madrugada y por el cuello las manos frías. Me pasas de lunar en lunar, de cornisa en cornisa, de saltar sin

Eres una canción que no suena, el silencio que no calla nunca. Eres anhelo, una espera, un abrazo vacío, una muerte lenta. Eres ausencia en una fecha señalada, puntual donde ya no te espero. Eres un “me voy”, diciendo entre dientes “no vuelvas”. Eres mi poema favorito, la rima de tus lágrimas con mi voz. Eres mi problema favorito, la definición de un autentico idiota. @Redry13

Éramos una respuesta muy tonta sin necesidad de una pregunta muy inteligente. Vives con la necesidad de escuchar un par de palabras que a veces no son sinónimo de lo que sienten tus constantes. Y si no sabes usar un corazón, ¿para qué lo tocas? Porque a veces no se trata de ser uno mismo, se trata de ser dos mismos que miran en la misma dirección, y estábamos de espaldas al mundo, intentando bailar al mismo tiempo canciones diferentes.  Una vez me llenaste de vértigos con los pies en el suelo, y yo estaba enamorado hasta las nubes, dando

Ayer recite por primera vez en mi vida en el Desierto Rojo. Estaba tan nervioso como emocionado. Y grabaron esto: [youtube https://www.youtube.com/watch?v=zs6zOws3xdk&w=480&h=360]

Ha llegado por fin la hora de que el amor te devuelva algún motivo. No vas a ser menos por saltar donde nadie salta, ni más, sólo un atrevido al que no tendría ningún miedo a besar. A veces encuentro corazones, pero no quieren acompañarme, sombras que cruzan contigo en el asiento contiguo del autobús. Miradas con fecha de caducidad, amores que van de parada en parada. Quiero que gobiernes los pasos que me acercan a ti, es la última oportunidad de firmar una tregua que detenga esta guerra de inseguridades. Que para querer hay que estar seguro, y no

Cuando se funden los problemas con la realidad y te conviertes en un juguete roto en tus manos. Y lo arreglas. Me pierde que no nos perdamos. Es imposible no separarse, junto a ti sólo pasan cosas buenas, el hielo enfría, el fuego no quema, y el chocolate sabe a chocolate. El pelo está desordenado, las ganas en su sitio y el amor ha desembarcado. No hay rastro de miedo en quinientos kilómetros a la redonda. Cualquier forma de sonrisa la llevas guardada en los bolsillos, esos bolsillos que espero que no se rompan en un futuro, esos a los

Domingo es guerra en uno solo de los dos bandos, balas perdidas que dejan ver el sol de vez en cuando. Domingo es siempre para contestar demasiado tarde, de perder el equilibrio por no saber arriesgarse. Es hielo sin nada que poder enfriar. Domingo es un beso mal lanzado, es un camino hacia delante a oscuras, los pasos cerca de un precipicio, el óxido de unos labios que no mostraron su pasión. Domingo son agujeros en la capa de cualquier superhéroe que le impiden volar un poco más alto. Domingo es querer borrar todo lo que sobra un de ti,

Otoño Es un final y es un comienzo, es un giro más en el ciclo vital de nuestras emociones, como desenvolver un caramelo de miel para la tos. Te vas como el verano y llegas bajo la lluvia, de salpicar en la piscina a escurrir el paraguas antes de entrar en casa. Es el asesinato del calor, el bienestar y el nacimiento en la sombra del frío emergente. Otoño son veinte poemas desesperados de Neruda y una despedida, son pantalones largos y una chaqueta que se abrocha con el paso de los días cada vez un poco más arriba. Otoño

Se querían al revés, sin tocarse. En realidad se querían, se querían como los demás, se querían pero el miedo se llamaba “distancia”. Lo único que quedaba era miedo, eso no impedía enamorarse del miedo. Se puede ser muy cobarde a tres centímetros, o a tres kilómetros cuando lo único que importa es no echar de menos. Trepaban sobre nubes de neón, y no vacilaban en los atascos, a diario sólo eran un mensaje que no llegaba nunca, sin nombres ni apellidos. Vacilaban contra la monotonía, y se sorprendían cuando el sol perdía un rayo cada noche. Se engañaban de